Presentación

Gladys Lizama Silva

Universidad de Guadalajara

El equipo editorial de Letras Históricas tiene la satisfacción de entregar al lector un número más de la revista: el trece. En éste, como en los anteriores, conservamos el mismo orden en la secuencia de los artículos; esto es, una ordenación cronológica desde temas del siglo XVIII hasta los relativos a todo el siglo xx, sin descontar, por supuesto, el testimonio que se refiere a aspectos de la arqueología precientífica peruana del siglo XVIII.

Con la publicación de este volumen el equipo editorial cumple un año de hacerse cargo de la tarea de sacar a tiempo, y antes si es posible, cada número, a fin de cumplir con los parámetros exigidos por las instancias evaluadoras de revistas científicas y, claro está, proporcionar al lector las nuevas investigaciones que se han desarrollado en diversos ámbitos de México y otros ámbitos latinoamericanos.

En estos últimos seis meses hemos trabajado en la construcción de la página Web propia de la revista, que podrán encontrar en el siguiente vínculo:http://revistascientificas.udg.mx/index.php/LH donde hallarán todos los números del primero al décimo de Letras Históricas en archivos pdf, y el once y el doce en formatos pdf y html. Pero no sólo eso, sino que también hemos adelantado muchísimo en la introducción del Open Journal System para que tanto colaboradores y autores como revisores y dictaminadores puedan, unos, ingresar a la página sus trabajos, y otros, redactar sus dictámenes directamente en línea. Y por supuesto que el lector visite la página y pueda leer los contenidos y resultados de investigación que la revista ofrece semestralmente. Cuando la implementación del Open Journal System de Letras Históricas esté completa, avisaremos al público lector; por supuesto que estamos abiertos a comentarios, críticas y sugerencias.

El presente número de la revista ofrece ocho trabajos en la sección “Entramados”. El primero de ellos, de Sara Sánchez del Olmo, se titula “Marginalidad, brujería y etnicidad en Nueva España: Mariana de la Candelaria, una maléfica mulata del siglo XVIII”, e intenta, a través de documentos de la Inquisición en el Archivo Histórico Nacional de Madrid, mostrar cómo en 1769 fue juzgada por brujería la mulata que llevó por nombre Mariana de la Candelaria. La autora aclara que esta mujer lejos estuvo de la brujería, que lo que verdaderamente transgredió fueron los cánones de la conducta femenina de la época, y que su condición étnica y socioeconómica fueron factores claves para su condena.

El segundo artículo se ubica en el ámbito de la demografía histórica; se titula “Crisis de subsistencia y epidemias en Taximaroa (1763-1814). Consecuencias en la población adulta”, y su autor, José González Flores, consagra el texto a analizar y medir la velocidad de expansión de las epidemias que afectaron a la población adulta de ese lugar, utilizando los métodos del francés Jacques Dupâquier y de los italianos Massimo Livi Bacci y Lorenzo del Panta, los cuales adecua a la realidad del espacio territorial estudiado a finales del siglo XVIII y comienzos de XIX. Para ello contó con información de registros parroquiales y fuentes únicas provenientes del Archivo General de Indias de Sevilla, del Archivo Histórico de la Parroquia de San José, Hidalgo, Michoacán, y el Archivo Histórico Casa de Morelos, en Morelia.

El tercer estudio podríamos colocarlo en los territorios de la antropología histórica, en tanto, tiene como preocupación el “Matrimonio entre parientes. Causas y causales de dispensa en la parroquia de Encarnación, 1778-1822”, tema desarrollado por Carmen Torres Franco sobre la base de documentos de dispensas matrimoniales depositados en el Archivo Histórico de la Arquidiócesis de Guadalajara y el Archivo Parroquial de Nuestra Señora de la Encarnación, en Encarnación de Díaz, Jalisco. El territorio analizado es el cubierto por la parroquia de Nuestra Señora de la Encarnación –Altos de Jalisco– y la temporalidad comprende, como en el anterior artículo, los finales del siglo XVIII y las dos primeras décadas del XIX. Como el título señala, la preocupación central de la autora es desentrañar por qué fue frecuente el matrimonio entre parientes.

La cuarta comunicación es la de Karina Villegas Terán, titulada “Las teorías criminológicas y la llegada del sistema Bertillon a la ciudad de México, ¿un caso de éxito?”. Se describe ahí cómo se concebía al sujeto criminal y “analizar la forma en la que los criminalistas mexicanos trataron de encontrar al tipo de criminal mexicano durante las últimas décadas del siglo XIX, mediante diversas teorías que pueden ser divididas en dos grupos: la escuela clásica o liberal y la positivista”. Para ello la autora recurre a fuentes del Archivo Histórico del Distrito Federal, del Ayuntamiento del Distrito Federal (fondo Cárceles) y a una nutrida bibliografía complementaria actual y contemporánea de la época.

El quinto trabajo, de la autoría de Zoraya Melchor Barrera y titulado “Factores de creación y cambio en las instituciones porfirianas de salud pública en Jalisco”, tiene el objetivo de narrar y “explicar los factores que hicieron posible [la creación] y consolidación del Consejo Superior de Salubridad” en el país y de la institución correspondiente en el estado de Jalisco a finales del porfiriato, desde el enfoque del neoinstitucionalismo histórico. Para tal fin, recurre a material documental de primera mano en fuentes del Archivo Histórico y la Biblioteca Pública del estado de Jalisco.

El sexto artículo, “Federico Gamboa. La memoria como oficio: de autobiografías, diarios y otros demonios personales”, de Julián Vázquez Robles, busca introducir al lector en el estudio de este importante novelista en su faceta de memorialista. Para Letras Históricas es importante que en sus páginas tengan cabida trabajos con temas literarios, sobre todo cuando se trata de escritos autobiográficos de un personaje de la talla de Gamboa; más si se centran en presentar bosquejos de épocas históricas pasadas, porque permiten abrir el abanico de opciones de lectura más allá del estricto campo de la historia y extendernos hacia la trayectoria de la literatura mexicana.

El conocido y premiado historiador Jean Meyer es autor del séptimo trabajo de esa sección, titulado “La Iglesia católica mexicana en un mundo global”. Es un ensayo de gran valor para que el lector se forme una imagen del itinerario seguido por la Iglesia mexicana en los últimos cincuenta años. Partiendo de sus propios trabajos ya publicados y de una bibliografía que conoce al dedillo, reflexiona sobre los pasos de esta institución en México, su inserción en el mundo global de hoy y el surgimiento de iglesias evangélicas y su significado en el ámbito nacional. Cada momento, cada conflicto, cada crisis del mundo católico mexicano es relacionado y analizado por el autor en el ámbito global y transnacional.

El último artículo de la sección fue escrito por Abel Astorga Morales, joven historiador que presenta en este número sus “Breves reflexiones en torno al movimiento social de exbraceros: un problema migratorio que escapó del pasado para llegar al presente”. Sustentado en la historia oral y una historiografía centrada en la temática de la memoria histórica, construye su relato sobre el camino seguido por el movimiento de antiguos braceros que trabajaron en la agricultura y el ferrocarril estadounidenses en el marco del Programa Bracero, en vigor entre 1942 y 1964. Durante todos esos años, a los trabajadores se les descontaba 10% de su salario para un fondo de ahorro, y luego ese dinero fue transferido a las arcas oficiales de México. El autor narra las vicisitudes vividas por los braceros, a muchos de los cuales nunca se les pagó ni devolvió ese dinero en México.

En la sección “Testimonios” se brinda al lector el trabajo que profundiza en el tema de “La arqueología precientífica en el Perú en el siglo XVIII”, escrito por Paula Rivasplata Varillas. Como es costumbre en esta parte de la revista, el objetivo es que el lector tenga la posibilidad de revisar material que narre aspectos testimoniales de la realidad latinoamericana, que en este caso la autora, haciendo uso del método hermenéutico y heurístico, atestigua cómo se hizo la arqueología en el siglo XVIII en el Perú.

Finalmente, en este número quisimos brindar un pequeño homenaje al doctor Federico Solórzano Barreto (23 de mayo de 2015) por décadas profesor del Departamento de Historia y Profesor Emérito de la Universidad de Guadalajara desde 1996, que se nos adelantó en la partida, presentando su obituario escrito por nuestra colega Angélica Peregrina.